Salsa de Alcachofa de Cangrejo y Ajo
El Dip de alcachofa de cangrejo con ajo podría ser solo el hor d'oeuvre que está buscando. Esta receta hace 12 porciones con 247 calorías, 6g de proteína, y 23g de grasa cada. Para 96 centavos por porción, esta receta cubiertas 6% de sus necesidades diarias de vitaminas y minerales. Esta receta es del agrado de 1 gourmet y cocineros. Una mezcla de corazones de alcachofa, carne de cangrejo, mayonesa y un puñado de otros ingredientes son todo lo que se necesita para hacer esta receta tan sabrosa. Será un éxito en su El Super Bowl evento. Es traído a usted por Allrecipes. Desde la preparación hasta el plato, esta receta toma aproximadamente 35 minutos. Es una buena opción si estás siguiendo un sin gluten y pescatariano dieta. Teniendo en cuenta todos los factores, esta receta obtiene una puntuación de espátula de 22%, lo cual es bastante malo. Tratar Salsa de Cangrejo de Alcachofa, Salsa de Aguacate, Espinacas y Alcachofas, y Salsa de Alcachofas con Tocino y Espinacas en Sartén para recetas similares.
Instrucciones
Precaliente el horno a 350 grados F (175 grados C).
En una cazuela de 1-1/2 cuartos, combine la mayonesa, la crema agria, la mezcla de sopa, los corazones de alcachofa, el queso y la carne de cangrejo.
Hornee sin tapar durante 30 minutos.
Vino recomendado: Chardonnay, Muscadet, Riesling
Los mariscos se pueden maridar con Chardonnay, Muscadet y Riesling. El chardonnay mantecoso es ideal para vieiras, camarones, cangrejo y langosta, mientras que el muscadet es una elección clásica para mejillones, ostras y almejas. Si tiene un poco de especias en sus mariscos, un riesling semiseco puede equilibrar el calor. Podrías probar el Chardonnay de Stonestreet Estate. A los críticos les gusta con una calificación de 4.1 de 5 estrellas y un precio de aproximadamente 36 dólares por botella.
Chardonnay de la Finca de Stonestreet
El Estate Chardonnay 2012 ofrece una columna vertebral mineral distintiva junto con un fuerte elemento cítrico. La mandarina y la mermelada emergen primero del vaso, abriéndose a un paladar que cae en cascada a través del melocotón y el rocío del océano, todo culminando en un final con un agarre y acidez sorprendentes.