Comprueba siempre la letra pequeña
El hecho de que un zumo de fruta pueda llevar una palabra como «saludable» impresa en letras grandes no significa que sea cierto. Además, muchas bebidas tipo zumo que compras en una tienda tendrán ingredientes añadidos que les restan aspectos positivos. Esto se debe a que tienen que durar en el estante y los ingredientes para garantizarlo no son especialmente naturales. Algunos nutricionistas dicen que como regla general, si no puedes pronunciarlo, echa un vistazo a lo que es.
Otro peligro a tener en cuenta son los azúcares añadidos. Muchos zumos de marca de supermercado endulzan deliberadamente las bebidas. Además, siempre debes estar atento al tamaño de la ración. Si bien una botella puede parecer pequeña, no significa que contenga solo una ración.
Opta por opciones prensadas en frío
Si deseas asegurarte de que el zumo que estás bebiendo sea lo más limpio posible, debes optar por zumos prensados en frío siempre que puedas. Muy a menudo estas bebidas se elaboran en una máquina conocida como exprimidor de masticación lenta. Esto significa que tiene un bajo número de revoluciones por minuto y no produce calor. Esto es a su vez asegura que el zumo conserva sus valores nutricionales. Aún mejor, haz los zumos tú mismo en casa a mano. De esta forma podrás elegir los ingredientes que más te convengan y asegurarte de que no haya aditivos. Una licuadora puede ser un artículo caro, pero se amortizará con creces con el tiempo.
Sé inteligente con los ingredientes
Si te interesa la alimentación sana, es probable que hayas visto numerosas fotos y vídeos de chefs de comida sana que hacen que la creación de alimentos maravillosos y saludables no suponga ningún esfuerzo. Para la mayoría de nosotros, este no es el caso. Sin embargo, los zumos son una manera fácil de proporcionar alimentos nutritivos a tu cuerpo de forma sencilla. Por ejemplo, es fácil incorporar ingredientes como la cúrcuma (que combate la inflamación) y el jengibre (que es un antioxidante que ayuda a la digestión). Puedes añadir muchos de estos superalimentos a tus zumos con facilidad, y solo te llevará unos segundos.
Por supuesto, las frutas naturales están llenas de vitaminas saludables, pero el objetivo debe ser introducir más verduras en tus zumos. Esto ayudará a mantener los niveles de azúcar bajos y contrarrestar la dulzura natural de algunas frutas. Las verduras como la remolacha y la zanahoria también son bastante dulces, mientras que las frutas como la piña y las manzanas son un poco más ácidas. Equilibrando ambos sabores, deberías ser capaz de llegar a un nivel de dulzor que sea a la vez saludable y agradable.
Elige siempre productos de temporada
Bien sean zumos, frutas, ensaladas, verduras, etc., siempre debes fijarte en los productos locales y de temporada. Esto hará que todo sepa mejor, ya que podrás obtener ingredientes que están en su mejor momento. Por supuesto, la fruta y verdura que puedas conseguir dependerá de dónde vives. Esto significa que vale la pena tomarse un tiempo para investigar lo que se produce localmente y lo que se puede comprar con facilidad.
Olvídate del «detox»
Durante mucho tiempo ha existido una escuela de pensamiento que recomienda una dieta completa de desintoxicación. Esto implica beber nada más que zumo durante varios días. Sin embargo, esto no solo no es saludable, sino que también es completamente innecesario.
Los zumos no deben tratarse como un sustituto de las comidas y tampoco son un sustituto de las frutas y verduras enteras. Más bien, deben considerarse como un suplemento a una dieta saludable. Además, las frutas y verduras enteras también son desintoxicantes en su forma natural, por lo que reducir su ingesta a solo su zumo no ofrece beneficios adicionales. Beber zumo limpio y fresco con los nutrientes e ingredientes adecuados puede ser sin duda un gran complemento a tu dieta, pero siempre deben ser solo eso, un complemento.
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