Cómo preparar pizza

Preparación

Primero tienes que preparar los ingredientes.

1. Debes tener la levadura, la harina y el azúcar a temperatura ambiente.
2. Vierte media taza de agua tibia en un tazón grande mara la mezcla (el agua caliente matará la levadura).
3. Añade 1 cucharadita de levadura al agua tibia. Es posible utilizar levadura instantánea o levadura activa.
4. Agrega 1 cucharadita de azúcar crudo o sirope de arce, no uses azúcar blanco refinado.
5. Revuelve suavemente la mezcla y luego déjala reposar durante 10 a 12 minutos.
6. La mezcla se volverá espumosa y burbujeante. Si no es así, significa que la levadura está inactiva y es necesario empezar de nuevo.

Preparación de masa para pizza

Ahora vamos a empezar a preparar la base de la pizza.

1. Cuando la mezcla esté espumosa, agrega 300 g (2,5 tazas) de harina, 1/3 de cucharadita de sal y 1,5 cucharadas de aceite de oliva al bol de la mezcla.
2. Mezcla todo para formar una masa. Es probable que necesites un poco más de agua, así que añádela poco a poco hasta que tengas una masa suave y no pegajosa. Si la masa está pegajosa, puede añadirle un poco de harina espolvoreada.
3. Amasa durante 5 minutos. Debes usar el talón de tu mano para presionar la masa contra la encimera y luego enrollarla antes de doblarla. Sigue repitiendo este proceso. Después de 5 minutos, la masa debe ser suave: si metes un dedo, debe hundirse y luego recuperar lentamente su forma original.
4. A continuación, debes dar forma de bola a la masa y añadir una fina capa de aceite para que no se seque. También debes engrasar el bol con un poco de aceite.
5. Cubre el bol con una servilleta o con una tapa húmeda y deja reposar a temperatura ambiente hasta que la masa haya subido lo suficiente como para duplicar su tamaño. Esto puede tardar de 1 a 4 horas dependiendo de la temperatura ambiente.

Preparación de la salsa para la pizza

Mientras la masa se eleva, puedes empezar a preparar la salsa.

1. Tritura 400 - 500 g de tomates.
2. Calienta 1,5 cucharadas de aceite en una sartén y añade 2 dientes de ajo picados. Fríe el ajo un minuto y luego añade una cucharadita de copos de chile rojo.
3. Añade el puré de tomate a la sartén junto con 0,25 cucharaditas de sal y 1 cucharadita de azúcar. Remueve con cuidado.
4. Cubre parcialmente la olla y deja que hierva a fuego lento hasta que se haya reducido a una consistencia gruesa.
5. Una vez espesada la salsa, añade una cucharadita de hierbas aromáticas italianas y 0,5 cucharaditas de pimienta triturada.
6. Deja que la salsa se enfríe por completo.

Preparación del aderezo

Ahora puedes empezar a preparar el aderezo de la pizza. Esto significa que debes rallar el queso y cortar cualquier verdura que desees colocar encima de la pizza (champiñones, cebollas, etc.) Asegúrate de mantener las verduras a temperatura ambiente para que no suelten humedad sobre la pizza, lo que la dejaría empapada.

Cómo hacer una pizza de masa fina

Ahora que todos los componentes están listos, es hora de comenzar a ensamblar la pizza.

1. Pasa la masa a una superficie de trabajo y aplástala para eliminar las burbujas de aire.
2. Divide la masa en dos o tres partes iguales, dependiendo del tamaño de las pizzas que quieras hacer.
3. Amasa un poco la masa y dale forma de bolas redondas. Si está pegajosa, espolvorea un poco de harina y sigue amasando.
4. Cuando la masa esté lista para estirarse, precaliente el horno a 240 ºC (470 ºF). Pon una bandeja para hornear o una bandeja de hierro fundido en el centro y deja que se caliente en el horno.
5. Espolvorea un poco de harina de maíz sobre bandeja, coloca una bola de masa en la bandeja y aplástala. Añade un poco de aceite.
6. Extiende y estira la masa sobre la bandeja con los dedos. Es probable que mida alrededor de 9 pulgadas. Lo ideal es que los bordes queden ligeramente más gruesos que el centro. Es mejor evitar el uso de un rodillo, ya que éste puede eliminar las burbujas de aire, y la base de la pizza quedaría demasiado densa.
7. Extiende la salsa de tu pizza sobre la masa.
8. Añade capas de queso rallado y tus otros ingredientes junto con cualquier hierba aromática que te guste.
9. Transfiere la bandeja con la pizza al horno colocándola sobre la bandeja para hornear que ya estará caliente.
10. Deja que la pizza se hornee de 8 a 10 minutos, o hasta que el queso se haya derretido y la corteza se haya dorado y esté crujiente.
11. ¡Corta la pizza y a disfrutar!

Consejos adicionales

Aquí tienes algunos consejos más para asegurarte de que tu pizza salga siempre perfecta.

• Activa siempre la levadura antes de añadirla a la harina. Por lo general, la levadura instantánea se añade directamente a la harina; sin embargo, al activarla primero, salvarás la harina en caso de que la levadura esté muerta.
• Evita usar demasiada levadura. Mucha gente cree que el uso de menos levadura es el secreto para una gran masa de pizza. La levadura tardará un poco más en funcionar, pero los sabores hacen que la espera valga la pena.
• Deja que la masa suba lentamente a temperatura ambiente. No te sientas tentado a subirla más rápido a una temperatura más alta. Además, no la juzgues por el tiempo, júzgala por el volumen. Déjala que suba hasta que se haya duplicado.