Parrilla de Cordero a la Parrilla con Costra de Hinojo
La parrilla de cordero a la parrilla con costra de hinojo podría ser la guarnición que está buscando. Esta receta sirve 8 y cuesta 32 centavos por porción. Una porción contiene 45 calorías, 1g de proteína, y 4g de grasa. Se puede disfrutar en cualquier momento, pero es especialmente bueno para El Cuatro De Julio. 1 persona ha hecho esta receta y la volvería a hacer. Dirígete a la tienda y compra sal kosher, aceite de oliva, dientes de ajo y algunas otras cosas para prepararlo hoy. Es una buena opción si estás siguiendo un hombre de las cavernas, sin gluten, sin lácteos y primario dieta. Desde la preparación hasta el plato, esta receta toma alrededor 1 hora y 30 minutos. Considerándolo todo, decidimos esta receta merece una puntuación espátula de 11%. Esta partitura no es tan buena. Tratar Costilla de Cordero con Costra, Costilla de Cordero con Hinojo Picante, y Costillero De Cordero con costra De Hierbas para recetas similares.
Instrucciones
Triturar las semillas de hinojo, el romero y el ajo con sal en un mortero, o picar lo más finamente posible.
Mezclar con pimienta y aceite.
Untar cordero con adobo. Enfríe, cubierto, al menos 4 horas y hasta 1 día.
Saque el cordero de la nevera 1 hora antes de asarlo a la parrilla. Envuelva las puntas de los huesos con papel de aluminio.
Calentar una parrilla a media-alta (40
con un área libre de carbón (para carbón vegetal) o un quemador apagado (para gas) para crear un área de calor indirecto. Ase el cordero, con la carne hacia abajo, a fuego indirecto durante 5 minutos. Voltee y ase a la parrilla durante 10 minutos. Voltea de nuevo; asa a la parrilla 10 minutos más. Mueva el cordero a fuego directo, con la carne hacia abajo y ase a la parrilla de 3 a 5 minutos, o hasta que esté crujiente y dorado y registre 140 (para cocido a fuego medio).
Deje reposar el cordero en un plato durante 15 minutos.
Cortar entre los huesos para servir.
* Deje la vaina más desnuda de grasa en la carne, suficiente para crujir en la parrilla, pero no tanto como para que la grasa que gotea cree un infierno.