Delicias de Bayas con Mantequilla de Maní
La receta Delicias de Bayas con Mantequilla de Maní podría satisfacer su antojo sureño en aproximadamente 20 minutos. Para 26 centavos por porción, obtienes un condimento que sirve 25. Una porción de este plato contiene aproximadamente 2g de proteína, 6g de grasa, y un total de 82 calorías. Es una buena opción si estás siguiendo un sin gluten y sin lácteos dieta. Dirígete a la tienda y compra fresas, chispas de chocolate con leche, cobertura batida y algunas otras cosas para prepararla hoy. Esta receta es del agrado de 1 amantes de la comida y cocineros. Considerando todas las cosas, decidimos esta receta merece una puntuación vertiginosa de 11%. Esta puntuación es bastante mala. Tratar Delicias de Mantequilla de Maní, Delicias de Mantequilla de Maní y Manzana, y Delicias de Chocolate con Mantequilla de Maní para recetas similares.
Instrucciones
Forre una bandeja para hornear con papel encerado; reserve. En un tazón pequeño, combine la mantequilla de maní, el chocolate con leche derretido y la cobertura batida.
Comenzando por la derecha del tallo, corta cada fresa por la mitad en diagonal. Saca la porción blanca de la mitad más grande de cada baya.
Unte o coloque la mezcla de mantequilla de maní entre las dos mitades; presione suavemente.
Coloque en la sartén preparada; refrigere por 15 minutos o hasta que cuaje. Sumerja la mitad inferior de las bayas en chocolate semidulce.
Colocar en la sartén. Refrigera de 15 a 20 minutos o hasta que cuaje.
Vino recomendado: Riesling, Cava, Zinfandel
Se puede maridar con Riesling, Vino Espumoso y Zinfandel. En general, hay algunas reglas que lo ayudarán a combinar el vino con la comida sureña. El riesling o el vino blanco espumoso, aptos para la comida, funcionarán con muchos alimentos fritos, mientras que el zinfandel es excelente con la comida a la parrilla. Un vino que puedes probar es Purple Star Ancient Lakes Riesling. Tiene 5 de 5 estrellas y una botella cuesta unos 12 dólares.
Riesling Estrella Púrpura de los Lagos Antiguos
Aromas de albaricoque y duraznos blancos recorren el paladar medio dulce con sabores de albaricoque seco, frutas de hueso y miel. Equilibrado en el final con acidez natural.